El movimiento vecinal recupera el suministro de agua tras dos años y medio sin él

«En catorce días se ha hecho lo que no se hizo en dos años y medio». Con estas palabras, el presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos La Loma de Úbeda, Francisco López, mostró su satisfacción por la recuperación del suministro de agua potable en las sedes de los colectivos, algo que el movimiento vecinal venía demandando al Ayuntamiento y que supuso un choque frontal con el anterior equipo de Gobierno, materializado incluso en distintas protestas.

Reunión el Equipo de Gobierno y la Junta Directiva de la FAVU

Ahora, con el cambio de corporación, se ha conseguido «normalizar» este servicio básico en todas las sedes que carecían de él, entre ellas el centro vecinal norte de la calle Ballesteros. Tal y como explicó la alcaldesa, Antonia Olivares, se trata de edificios públicos, por lo que el agua no se paga, como ocurre con todos los inmuebles de titularidad municipal, según consta en el pliego de condiciones por el que se adjudicó el servicio de abastecimiento a Acciona. Así, «se ha hecho el enganche sin coste, en principio» y ahora «habrá que ver cómo se normaliza esta situación con las asociaciones».

Olivares manifestó que «era de justicia» buscar una solución a esta situación» de falta de agua, porque «si están trabajando por los barrios y por la ciudad, la administración tiene la obligación de facilitarles las condiciones, algo que no depende de la voluntad de quien esté, sino que va implícito en el cargo». Así, una vez en la Alcaldía, no dudó en hacer los trámites pertinentes para restablecer el suministro puesto que «hay que garantizar unos servicios mínimos para que las actividades de las asociaciones se sigan desarrollando».

Primera reunión 

Esta novedad fue uno de los temas que se abordaron en la primera reunión que mantuvo la Federación de Asociaciones de Vecinos con la nueva alcaldesa, a la que también asistieron otros miembros de su equipo de gobierno como los concejales de Hacienda, Juventud y Participación Ciudadana, Javier Gámez, Francisco Lozano y Magdalena Urrutia, respectivamente.

«Llevábamos cuatro años esperando y volvemos a la normalidad, que es lo que queríamos», aseveró Francisco López, destacando la «normalización» de las relaciones entre el movimiento vecinal y el Consistorio. Sobre la mesa se pusieron otros asuntos «tan comunes» como el funcionamiento de los consejos sectoriales y los convenios, en éste último caso con la intención de fijar unas pautas que se vayan renovando anualmente.

«Nuestro Reglamento de Participación Ciudadana fue el mejor de Andalucía, pero no se hizo nada por él», añadió, con la esperanza de que esto cambie y se pueda llegar a una participación ciudadana real, algo por lo que también apostó la alcaldesa, quien aseguró que trabajará para normalizar las relaciones con todos los colectivos de la ciudad.